Nos inspiran
Personas y proyectos que están consiguiendo que hablemos de cuidados en todos los ámbitos: familiar, sanitario, social, cultural, público... Cuidopía te invita a descubrir la sociedad de los cuidados a través de su mirada.

Personas y proyectos que están consiguiendo que hablemos de cuidados en todos los ámbitos: familiar, sanitario, social, cultural, público... Cuidopía te invita a descubrir la sociedad de los cuidados a través de su mirada.
El plan de cuidados de enfermería es la herramienta fundamental que permite evaluar de manera personalizada, en función del estado de salud, el historial clínico y la situación familiar y social, qué necesidades de cuidado tiene un paciente en cada momento. Esta hoja de ruta la establece el personal de enfermería, pero para poder ponerla en práctica es imprescindible contar tanto con la participación del paciente como de las personas cuidadoras. Como señala Ana María Piedrafita Sañudo, enfermera especialista en salud mental del área de Psiquiatría del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, “se trata de un trabajo en equipo que aborda el cuidado en todas las esferas de la vida de un paciente”.
El duelo es un proceso natural que se produce tras la experiencia de una pérdida. Este cambio supone un tiempo de adaptación que cada persona vive de una manera distinta. Tanto en entornos familiares como profesionales, quienes ejercen los cuidados pueden experimentar cambios físicos y emocionales que es importante conocer e identificar. El apoyo y el acompañamiento de las personas más cercanas, o de profesionales sanitarios si fuese necesario, es fundamental para poder afrontar y superar el duelo. ‘Decir adiós’, la nueva unidad de Escuela de Cuidados, explora la gestión emocional del duelo a través de la historia de Paula, Óscar y Natalia, quienes experimentan el duelo como hijos y cuidadora profesional, respectivamente. La unidad ofrece también los consejos de personas expertas para el acompañamiento emocional durante estos procesos.
“Es la tranquilidad de saber que están bien”. Así define Guillermo lo que significa para él y su familia el servicio de asistencia personal con el que cuentan su hermano y su mujer, ambos con enfermedad mental grave. “Hasta hace un año, se valían bien con ayudas puntuales, pero hace unos meses saltaron las alarmas con sus problemas para la gestión del dinero. Valoramos la posibilidad de una residencia, pero los tiempos de espera para las personas con estas enfermedades son muy largos y hay pocas plazas”. Guillermo encontró en internet información sobre la asistencia personal y consultó con el psiquiatra que atiende a su hermano. “Me informó de que el Asistente Personal era una persona formada especialmente para tratar con personas con enfermedad mental y pensamos que podía ser una solución”. Guillermo contactó con la Asociación Aragonesa Pro Salud Mental (ASAPME), que forma y facilita los servicios de Asistentes personales para personas con enfermedad mental. “Hemos pasado de ‘esta situación es insostenible’ a que se haya reconducido en unos meses”.
Entrar en el Centro Integral de Simulación Avanzada de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC) es como entrar en cualquier hospital donde acudimos habitualmente. Hay una sala de espera, consultas, instrumental médico, pacientes y profesionales sanitarios. La diferencia está en que, aquí, los casos son simulaciones y el objetivo es la formación de los estudiantes universitarios de medicina, enfermería, psicología, fisioterapia y odontología. Una experiencia inmersiva de la mano de la tecnología que pretende no solo entrenar al alumnado en los protocolos médicos y los aspectos técnicos, sino también en habilidades emocionales y de comunicación que fomenten la empatía y un trato más humano en los futuros profesionales sanitarios.